Bebidas saludables Blog

Preparación del Kéfir de Agua

Ahora que ya sabemos que el kéfir de agua y el kéfir de leche son básicamente similares, podemos aproximarnos al procedimiento de preparación de un refresco de kéfir de agua. Necesitamos un mínimo de tres ingredientes: cultivo de kéfir de agua, azúcar, fruta (y agua, claro).

Tradicionalmente en la preparación, el cultivo de kéfir se obtenía de otra persona que elaboraba el refresco en casa que, puesto que los gránulos van creciendo, te daba una parte de cultivo que le sobraba. Mirando en Internet y en redes sociales se pueden encontrar foros dónde hay personas que te pueden dar el cultivo. Aunque hoy en día existen páginas web especializadas dónde puedes comprar cultivo fresco y de calidad para hacer kéfir de agua.

Por las características de los nódulos de kéfir de agua, una simbiosis de tres grupos microbianos, entre cultivo y cultivo se pueden encontrar diferencias notables respecto a la producción de gas, alcohol, compuestos ácidos, compuestos gelatinosos, tiempo de fermentación, … Cuántas más fermentaciones realizas, más se especializa el cultivo, así que un mal cultivo (por ejemplo que conduzca a un refresco muy ácido), cada vez tendrá esa característica más remarcada.

Es por eso que comprar el cultivo en un comercio puede ser muy interesante para garantizar que funcionará como deseamos.

El azúcar y la fruta serán las fuentes de nutrientes del cultivo.

Os podéis preguntar… ¿Y porqué fruta para la preparación del kéfir de agua?, ¿no es bastante con el azúcar? ¿es posible obtener kéfir de agua sin azúcar?

Aunque el azúcar es el principal nutriente que van a consumir, es necesario que tengamos un mayor número de nutrientes a disposición del cultivo para que este viva como es debido. Para que nos hagamos una idea, sería como si a una persona se le diese solamente proteínas e hidratos de carbono, acabaría enfermando al no tener vitaminas en la dieta. Las frutas contienen compuestos nitrogenados (básicamente aminoácidos), que son esenciales para la supervivencia del cultivo de kéfir.

Preparación del kéfir de agua en casa

El procedimiento que dice cómo preparar kéfir de agua es sencillo.

Kéfir de agua Preparación:

Para la preparación del kéfir de agua casero, necesitaremos un recipiente suficientemente grande. Ponemos de 40 a 60 gramos de azúcar por litro de agua, entre 5 y 20 g/l de fruta y al menos 40 g de nódulos de kéfir de agua. Disolvemos el azúcar en agua y posteriormente añadimos la fruta y los nódulos de kéfir.

Idealmente debe poder intercambiar aire con el exterior del envase (liberar parte del gas que se produce y captar oxígeno), así que podemos dejar el recipiente con la tapa sin cerrar del todo o bien taparlo con una gasa (o similar, en la imagen el tarro de cristal está tapado con un calcetín de nylon cortado).

Cuando demos por finalizada la fermentación (y es algo que sólo se puede hacer probando el refresco o bien dejando un tiempo siempre fijo con una determinada mezcla azúcar/fruta/agua y cantidad de cultivo que conozcamos), deberemos filtrar el refresco para tirar la fruta y recuperar los nódulos de kéfir de agua para su siguiente uso.

Una forma sencilla de hacerlo y garantizar que nuestro cultivo está siempre en perfectas condiciones es tenerlo en una bolsa de infusiones o protegido en una gasa suficientemente grande. También se puede poner la fruta en una bolsa de infusiones. De este modo, cuando consideremos que nuestro refresco está listo sólo hay que retirar las bolsitas (la de la fruta y la de los nódulos de kéfir de agua) y podemos tomar el refresco.

Si se ponen los gránulos y la fruta sueltos en el tarro, habrá que colar el refresco y del colador tirar la fruta y recuperar los gránulos. En este segundo caso nuestro cultivo de kéfir puede quedar bastante sucio ya que en contacto con la fruta ésta puede soltar trocitos de piel y/o fibras que luego no podremos retirar del cultivo de kéfir, así que recomendamos tener los nódulos en una bolsa de infusiones o una gasa aparte.

Características de nuestro kéfir casero. Cómo consumir kéfir de agua.

Puesto que el cultivo de kéfir va a ir creciendo, de vez en cuando tocará abrir la bolsita y retirar el exceso de nódulos que no necesitemos. Se pueden pueden conservar refrigerados para usarlos más adelante y disminuir su actividad.

El cultivo de kéfir va a ir consumiendo el azúcar, creciendo y liberando células en la bebida. El refresco se volverá turbio por las células en suspensión e irá perdiendo su sabor dulce (por el azúcar disuelto) para irse volviendo ácido. Mientras haya azúcar presente el kéfir seguirá consumiéndolo y produciendo ácidos orgánicos y compuestos de todo tipo. Así que el sabor final dependerá de la cantidad de azúcar que hayamos usado (a más azúcar más ácido), el tiempo que lo tengamos fermentado y el tiempo que tardemos hasta que nos lo bebamos.

Recuerda, aunque ya hayamos retirado los nódulos de kéfir de agua y la fruta y hayamos puesto nuestro refresco en una botella, puesto que el kéfir de agua es una bebida que contiene los microorganismos de kéfir vivos, éstos seguirán consumiendo todos los azúcares presentes en la bebida hasta que no queden más. El sabor de tu kéfir de agua puede variar si lo consumes acabado de elaborar o al cabo de diez días aunque hayas seguido la misma receta.

El azúcar y el kéfir hecho en casa

Para elaborar kéfir de agua se pueden usar diferentes azúcares (blanco, moreno, panela, ágave, …) y frutas (desde frescas como el melocotón o la piña hasta, idealmente, deshidratadas como las pasas y los dátiles). Con cada azúcar y cada fruta obtendrás un refresco con unas características únicas, no sólo en cuanto a sabor sinó respecto a la acidez final, el gas, el tiempo que va a necesitar para fermentar, ect. Así que las posibilidades  son muy extensas y hay que ir probando qué combinación nos gusta más.

Algo muy frecuente para elaborar kéfir de agua es añadir limón fresco (de 10 a 50 g/litro – de 1/8 a medio limón por litro de bedida).

El limón no sólo aromatiza y da frescor al refresco sino que ayuda en la fermentación ya que libera compuestos ácidos que favorecen a los microorganismos del kéfir. El limón se puede sustituir por otras frutas ácidas como el pomelo, la naranja o la mandarina. Para dar sabor y propiedades también se pueden emplear infusiones como por ejemplo la menta, el jengibre, la canela, etc…

Las posibilidades a la hora de hacer kéfir de agua son innumerables, se trata de ponerse manos a la obra y experimentar.

Pero si quieres ir a tiro hecho, las bebidas Ecológicas de Prokey te aseguran la calidad de los ingredientes, el proceso de elaboración, las propiedades de la bebida y mantienen el sabor que esperas gracias a un proceso estudiado y a los avances en I+D que hemos llevado a cabo para conseguirlo.

Entradas relacionadas

Deja tu comentario